El fútbol es amor, es pasión,  risas, lagrimas, hay héroes y hay villanos, pero lo mejor de todo es la convivencia entre familia y amigos apoyando los colores de su camiseta y en esta ocasión fue algo para la historia. Las Chivas y Los Tigres nos regalaron una final no apta para cardíacos ya que el rebaño sagrado  muy temprano anoto el primer gol por parte de El Piojo Alvarez y poco después vino el segundo gol donde parecía ser el último clavo para la caja de Los Tigres que no podían creer lo que estaba pasando en ese momento.  Así se fueron al descanso y hay que recordar algo muy importante,  el marcador 2-0 es muy engañoso y en la segunda parte Los Tigres vinieron con otra mentalidad de triunfar y así fue como sucedió,  después de empatar el marcador ocurrió algo que todos los fanáticos de Chivas no esperaban,  en una jugada increíble caía el tercer gol de el equipo de la sultana del norte para que al final se coronarán como CAMPEONES. Moraleja, la mentalidad de campeón te lleva a ser un campeón y la confianza nunca es buena aunque vayas ganando. Felicidades a Los Tigres y a todos sus aficionados.